domingo, 26 de diciembre de 2010

EL ÁRBOL DE NAVIDAD: Origen, leyenda y tradición


Por Mario ALONSO AGUADO, (Mercedario).
(Publicado en el periódico “El Semanal de La Mancha”, 24- XII-2010)

Ante la proximidad de la Navidad, las calles y plazas de nuestros pueblos y ciudades cobran nuevo color, lo mismo sucede con los escaparates de los pequeños comercios tradicionales en muchas de nuestras calles peatonales, o con las entradas a los grandes centros comerciales en el extrarradio de nuestras capitales.
También nuestros hogares, especialmente los comedores y salones de cada casa, se ven inundados de la luz y del colorido procedente de la decoración navideña. Y por supuesto, los templos católicos, siguiendo tradiciones ancestrales y las directrices marcadas por la liturgia propia de este tiempo, aprovechan la Navidad para hacer de ella una catequesis diligente montando Nacimientos vivientes, Portales de Belén, árboles de Navidad, etc.

Algunos, más papistas que el Papa, han querido oponer el árbol navideño al tradicional Portal, como si el primero fuese un elemento laico totalmente ajeno al segundo. Árbol versus Portal, laicismo frente a confesión de fe, paganismo ante cristianismo, pero nada más lejos de la realidad. La bella costumbre de colocar un árbol adornado en el tiempo de Navidad, se encuentra también en bastantes iglesias y, sin lugar a dudas, es una clara referencia cristiana.
El árbol de Navidad, además de simbolizar al invierno o al año nuevo entrante, es al mismo tiempo un signo popular hondamente cristiano. Su origen parte de la idea del “Árbol del Paraíso”, que en estos días especiales de la Navidad apunta a lo más alto indicando que en Cristo se ha cumplido toda promesa y nace la nueva vida del paraíso. En medio de los árboles de hoja caduca, muertos en el frío invierno, el abeto verde se presenta como signo de Cristo, el Viviente, recordándonos que él, nacido por nosotros en Belén de Judá, es el verdadero Árbol de la Vida, aquel del que fue separada la humanidad a causa del pecado del primer Adán.
No podemos olvidar, además, que un árbol fue protagonista de la redención, pues el que venció en un árbol fue en un árbol rendido.
La costumbre de poner árboles de Navidad es relativamente reciente en España, su origen procede de los países nórdicos. Como dije antes, en algunos lugares reemplaza a la venerable tradición latina de poner Belén o Nacimiento. Pero esto no debiera ser así. Ambos elementos no solo no son incompatibles, sino que se complementan perfectamente. Colocar un árbol junto a un Nacimiento nos recuerda que la Redención del género humano, culminada en el Árbol de la Cruz, tuvo su inicio con el nacimiento del Salvador.

La desbordante imaginación popular, que siempre acude a leyendas para tratar de explicar lo prodigioso y admirable, comenzó a contar, a partir de la Edad Media, que en la noche mágica de Navidad no solo entonaron cánticos los ángeles y se alegraron los pastores, sino que toda la creación cobró nueva vida. De ese modo, los animales comenzaron sorpresivamente a hablar y a cantar, las plantas empezaron a florecer como si de una adelantada primavera si tratara; y los árboles dieron repentinamente sus nobles frutos: castañas, avellanas y nueces; naranjas, peras y manzanas; membrillos, granadas y limones; higos, bellotas y aceitunas. La naturaleza entera se desbordaba.
Tan solo el abeto que nunca florece, quedó muy triste, ya que no podía sumarse a la alegría que el cosmos manifestaba ante el nacimiento del Redentor. Por eso, cuenta la leyenda que el Señor tomando en sus divinas manos un manojo de estrellas las arrojó sobre sus estériles ramas, quedando de ese modo alegremente resplandeciente. Prosigue la historia, diciendo que cuando los tres Magos llegaron al Portal de Belén, guiados por una gran estrella, ésta se posó en lo más alto de un abeto cercano, iluminando así el lugar exacto donde nació el Hijo de Dios.
Existía también una piadosa creencia popular según la cual de una semilla del Árbol del Paraíso había nacido otro árbol, de cuya leña, siglos más tarde, se hizo la cruz salvadora del monte Calvario. Por eso, un árbol puesto junto al Belén nos puede recordar, como ya expresé anteriormente, que la Redención comenzó con el nacimiento de Cristo. Pero eso es ya otra historia, para contar más tarde, cuando pase el Carnaval y la Cuaresma. Hasta entonces.

miércoles, 22 de diciembre de 2010

LA COFRADÍA DEL ROSARIO FUNDADA EN LA PIEDAD


Nunca se ha tenido constancia de ello, pero ciertamente en el año 1759 se fundó dentro de la propia cofradía de la Piedad la hermandad de Nª Sª del Rosario debido a la gran devoción que deparaba la imagen de Nª Sª de la Soledad.

Esta hermandad estuvo muy unida a la Piedad.
Era una especie de comisaria, compuesta por propios cafrades que celebraban la fiesta del Rosario en el mes de Mayo.


Así se reflejaba en el Diario de Valladolid:


"El 6 de mayo de 1759 salió de la iglesia de la Piedad rosario general en que sacaron a Nuestra Señora de la Soledad, la que sale en la procesión del Viernes Santo, habiendo precedido el día antes salve solemne por la noche y fiesta con exposición del Santísimo Sacramento y sermón.

Dicho día dio principio la hermandad del Rosario que fundaron.


El 9 de julio en dicha iglesia, al tiempo de salir el rosario, vino el llamador con un diputado antiguo de la cofradía y grande bienhechor, y se llegó a tanto que llegaron a las manos de manera que el llamador hirió al diputado con un atril en la cabeza de forma que llegó a echar bastante sangre, por cuya causa quedó la iglesia violada y mandada cerrar de orden del Sr. Obispo, quien recogió la llave y prendió al delincuente.

Estuvo cerrada la iglesia hasta el día 30 de marzo del año siguiente que fue Domingo de Ramos cuando se abrió.


El día 19 de julio de dicho año el Sr. D. Juan Manuel Fernández, cura ecónomo de la parroquia del Salvador, de orden del señor provisor, sacó y llevó a dicha parroquia del Salvador a S.M. Sacramentado, dejando la iglesia cerrada a causa de la competencia de los jueces que fueron el señor provisor y un alcalde de la sala del crimen sobre castigar al delincuente, y al cabo se compuso y la iglesia se abrió como dicho es"

lunes, 20 de diciembre de 2010

LA MERCED da PASO a EL CARMEN: Historia de una imagen transformada.

Como ya comentamos hace unos días, la relación entre la Orden de la Merced y algunos cofrades de la Piedad ha sido un hecho. Tras intercambiar opiniones y conocernos personalmente la colaboración ha empezado a funcionar y una primera muestra de ello es el interés por la historia común que nos une.

El Padre Mario Alonso Aguado, doctor en Hª de la Iglesia, de su arte y de su patrimonio, refleja muy bien en sus artículos ese gran conocimiento, en algunos casos minucioso y detallista, de hasta que punto la historia nos depara sorpresas.

Como el artículo que a continuación exponemos y que muy amablemente nos ha cedido al blog para disfrute y deleite de todos los Vallisoletanos.


"A los estudiosos y curiosos del mundo del arte en general, las pesquisas e indagaciones nos llevan a veces a descubrir hechos insólitos y llamativos como el que vamos a referir en el presente artículo. El viajero inquieto que se adentre por las calles y vericuetos de la ciudad de Valladolid escudriñando el contorno de su renombre histórico puede recaer en la perplejidad de Góngora: “¿Vos sois Valladolid?”. Porque la capital de la vieja Castilla es una ciudad pujante y emergente que recupera, con decisión y satisfacción, las trazas de su mejor porte. Nada tiene que ver con la imagen que ofrecía en los años de nuestra adolescencia estudiantil, cuando el escritor Francisco Umbral la describió como “un viejo galeón desguazado entre fábricas”.
Si recalamos en la remozada Iglesia de la Virgen de San Lorenzo, patrona de la ciudad, admiraremos en su exterior la torre gótica, que como centinela parece vigilar desde su aspecto acastillado, o su bella portada neoclásica. Ya en el interior, nuestra mirada repara en la imagen de la patrona de Valladolid, que llegó a la ciudad del Pisuerga procedente de la localidad toledana de Consuegra, en época medieval, en tiempos de leyendas y apariciones. Pero, no es ella la protagonista de nuestra historia si no una supuesta Virgen del Carmen venerada al fondo del templo, y que en realidad es una imagen de la Virgen de la Merced transformada.
La advocación del Carmen llegó a la Iglesia de San Lorenzo con ocasión de la exclaustración y desamortización decimonónica. La V.O.T. del Carmen estaba establecida en el desaparecido convento de carmelitas calzados. Veneraban una Virgen del Carmen, obra de Claudio Cortijo, que salió del convento buscando nuevo aposento. En 1848 los seglares carmelitas se asientan con su imagen mariana en San Lorenzo, y allí aumenta el número de sus miembros y expanden la devoción a la Virgen. Cuando las Órdenes religiosas se restauran, los carmelitas descalzos se instalan, en 1893, en la amplia iglesia monacal de San Benito el Real. Es entonces cuando la Venerable Orden Tercera del Carmen se traslada con su imagen hasta San Benito. Ello motiva que la feligresía de San Lorenzo proteste fuertemente por el traslado, ya que el fervor a la Virgen del Carmen había calado hondo en la misma. El Cardenal Antonio María Cascajares, Arzobispo de Valladolid, media en la protesta y, para solventar el caso, decide donar una nueva imagen para su veneración. La talla en cuestión procedía del entonces Museo Provincial de Bellas Artes –hoy Museo Nacional Colegio de San Gregorio, denominado por muchos como “El Prado de la Escultura”- La imagen fue cedida mediante una Real Orden fechada el 9 de mayo de 1893. En los inventarios del Museo figuraba como una “Virgen de la Merced”, datada en el siglo XVII y perteneciente a la Escuela Castellana, siguiendo los modelos iconográficos de Gregorio Fernández. Escultura de gran calidad y acabado perfecto. Posee elegancia y suavidad en el rostro y tiene, en la parte trasera de su capa, los típicos pliegues que repiten formas geométricas y duras con perfiles angulosos propios del escultor sarriano.
La imagen fue bastante trasformada, los escapularios mercedarios fueron tornados por los carmelitanos. El escudo de la Merced que tenía al pecho fue sustraído, todavía hoy conservaba los engarces; el amarfilado blanco de su túnica y escapulario fueron repintados de color marrón, y un nuevo Niño, desafortunado y poco acorde con el estilo de la Madre, fue puesto en su brazo izquierdo.
¿Pero, de dónde procedía realmente la imagen de la Merced? ¿Cómo había llegado hasta el Museo? El pie al descubierto lo evidencia, la imagen provenía del Convento de San José de Valladolid, perteneciente a los mercedarios descalzos, que poseían, en el decir del historiador Antolínez de Burgos, una iglesia “de las más acabadas, más curiosas y más pulidas de esta región”. La imagen fue venerada en su plural de las Mercedes y gozó de gran devoción, hasta llegó a ser procesionada por las calles de Valladolid como lo evidencian las ranuras de su peana. En algún documento se la denomina “N. Madre la grande”.
He aquí la historia, algo rocambolesca, que padeció esta imagen de la Virgen de la Merced con su transformación, y que hoy, tras 116 años, aguarda a que una acertada restauración la devuelva a su estado primigenio, recobrando su primitivo esplendor y su auténtica advocación."


Mario Alonso Aguado (de la Orden de la Merced, Valladolid)

jueves, 16 de diciembre de 2010

EL ENTIERRO, ESE PASO OLVIDADO


En 1630 se proyectó su ejecución por parte de los responsables de la Cofradía, entonces los hermanos cofrades Tomás de Prado, Pedro de Luna y Diego de Medina, y se encargó de ello a Gregorio Fernández, el cual realizó un medelo en cera.


En 1642 se estrenó y realizó su primera salida procesional, entonces acompañó en la planta de procesión a otras escenas de la pasión: ( Cristo de la Humildad, Longinos, la Cruz, Nª Sª de la Soledad y Nª Sª de la Piedad).
Poseía entonces 7 figuras (Cristo, Nicodemo, José de Arimatea, Nuestra Señora, San Juan, la Magdalena, y el que levantaba la tapa del Sepulcro, más una cruz vacía)


Así lo hizo ininterrumpidamente hasta 1808, momento en el que deja de salir por Semana Santa, sus figuras fueron deteriorándose y se almacenó en las dependencias de San Antón en condiciones poco idóneas para su conservación.


Fueron trasladándose pieza por pieza al entonces Museo de Bellas artes, quedando únicamente la escultura de Ntro Señor en su Entierro en una de las capillas de San Antón.

Y aunque apenas salía en procesión la hermandad le dedicaba por Cuaresma su corrspondiente acto litúrgico, bien fuese un triduo o quinario.

Hoy en día, y desde que se recuperó para lo que fue creado, es decir, para salir en procesión, nunca se le ha ofrecido ningún acto de culto, desde que en 1995 se restaurase por completo.
Aunque haya perdido su denominación primera y 4 figuras más, al menos, si podría dedicársele por Cuaresma, y en los días previos a la Semana Santa, un pequeño acto de oración.
No sólo sirve para sacarle por nuestras calles cada primavera.

martes, 14 de diciembre de 2010

CAMINOS ENCONTRADOS, MOMENTOS DE REENCUENTRO.

Cuando se estableció la orden de la Merced en Valladolid a finales del siglo XIII , nadie podía pensar que, años más tarde, en su convento surgiese la Cofradía de Ntra Sra la Piedad.
Tampoco que allí estuviese establecida canónicamente durante más de 150 años.

Padres y frailes mercedarios predicaron a lo largo de los siglos novenas a nuestros titulares, a la Virgen de la Soledad, a Nª Sª de la Asunción o al Ecce Homo.

Y si nadie en esos siglos pasados pensaba todo esto, mucho menos podíamos imaginar que 5 siglos después la orden de la Merced volvería a reencontrarse con algunos cofrades de la Piedad.

Pues bien este primer paso ya se ha dado, sería deseable que esto culminase a nivel de organización y colaboración más estrechas, entre ambas organizaciones; pero mientras esto llega, que seguro llegará, afortunadamente hemos podido conocer al Padre D. Mario Alonso Aguado, natural del pueblo de Aldeanueva de San Bartolomé, provincia de Toledo.

Es sacerdote, licenciado en Historia de la Iglesia, dirige y colabora en "Caminos de Liberación", revista del mundo mercedario, donde se exponen temas de gran interés para la familia mercedaria, pero que desean difundir entre aquellos que de alguna manera nos sentimos unidos a ellos.

Ya ha participado con alguna cofradía de Valladolid en alguna celebración, en concreto con la Pasión, pues predicó el Quinario al Cristo del Perdón.

Cursó estudios curiosamente en el Seminario de Valladolid hace algunos años, encontrando ya entonces su interés por el arte, la historia y las tradiciones, y como no la posibilidad de que tanto su orden de la Merced como nuestra Hermandad de la Piedad se encontrasen de nuevo en ese camino que trazaron conjuntamente hace ya algunos siglos.

Ojalá que estos primeros contactos sigan fructificando, pues a ellos, a los frailes mercedarios la Piedad les debe sus primeros pasos en Valladolid. Ojalá que todos los cofrades de la Piedad sepamos valorar este reencuentro y ayudar para que este pequeño comienzo siga dando sus frutos en el futuro.

Gracias Mario por tu interés y ayuda seguiremos caminando conjuntamente, y nuestra Madre bajo sus dos advocaciones: Piedad y Merced, nos ayudarán en ello.
(Foto de arriba, Virgen de la Merced, en la iconografía de la Piedad)

jueves, 9 de diciembre de 2010

RECUERDOS Y SEMEJANZAS

La Iglesia Penitencial de Ntra Sra de la Piedad fue derribada en 1791, sólo estuvo en pie 130 años, tiempo más que insignificante como para derribarla por mal estado.
Esa fue la escusa propuesta desde el Ayuntamiento de Valladolid para demolerla y posteriormente abrir lo que hoy es la calle López Gómez.

Aún así esta Iglesia Penitencial, también bajo la advocación de Santa María de la Asunción, sirvió de modelo para dos Iglesias en Valladolid que afortunadamente si se conservan:

La Iglesia Conventual de las Brígidas, que en 1668 comienza su construcción y en 1692 se añaden nuevas partidas presupuestarias. Trabajó en ella Manuel Izquierdo.
El templo fue bendecido el 6 de mayo de 1696, y el 19 de agosto de 1703 se hizo el traslado del Santísimo Sacramento.

Hoy en día también ha perdido su función principal, pues aunque se la ha restaurado por completo, ha dejado de ser una Iglesia para el culto.

La otra Iglesia es la de San Felipe Neri, que si conserva la función para la que fue creada.
El 14 de junio de 1675 se empieza su construcción por parte del maestro de obras Antonio de la Iglesia. La bendición del nuevo templo se realizó el 24 de julio de 1683.


Y el Santísimo fue colocado en el altar mayor el 9 de agosto del mismo año. En 1710 se hizo la fachada principal.


Afortunadamente estas dos fachadas, que se hicieron tomando como modelo la de la Piedad, nos evocan recuerdos del pasado al menos a los cofrades de esta hermandad.

viernes, 3 de diciembre de 2010

ADVIENTO y NAVIDAD


ADVIENTO Y NAVIDAD

.- EL ADVIENTO: SIGNIFICADO Y CONTENIDO:


Adviento significa venida. Este tiempo nos prepara para la venida del Señor.

La venida de Cristo al mundo se realiza en un triple plan:

PASADO: venida histórica a Palestina,
PRESENTE: venida sacramental, hoy,
FUTURO: venida gloriosa al fin del mundo.

.- LOS GRANDES TESTIGOS DEL ADVIENTO

Son tres: El profeta Isaías, Juan el Bautista y la Virgen María.

Isaías: anuncia cómo será el Mesías que vendrá. Sacude la conciencia del pueblo para crear en él actitud de espera. Exige pureza de corazón.

Juan el Bautista: señala quién es el Mesías, que ya ha venido. Él mismo es modelo de austeridad y de ardiente espera.

María: es la figura clave del adviento. En ella culmina la espera de Israel. Es la más fiel acogedora de la palabra hecha carne. La recibe en su seno y en su corazón. Ella le prestó su vida . María es Jesús comenzado. Ella hizo posible la primera navidad y es modelo y cauce para todas las venidas de Dios a los hombres. María, por su fidelidad, es tipo y madre de la Iglesia.

LAS ACTITUDES FUNDAMENTALES DEL ADVIENTO

1. Actitud de espera. El mundo necesita de Dios. La humanidad está desencantada y desamparada. Las aspiraciones modernas de paz y de dicha, de unidad, de comunidad, son terreno preparado para la buena nueva. El adviento nos ayuda a comprender mejor el corazón del hombre y su tendencia insaciable de felicidad.

2. El retorno a Dios. La experiencia de frustración, de contingencia, de ambigüedad, de cautividad, de pérdida de la libertad exterior e interior de los hombres de hoy, puede suscitar la sed de Dios. El adviento nos ayuda a conocer mejor a Dios y su amor al mundo. Nos da conocimiento interno de Cristo, que siendo rico por nosotros se hace pobre.

3. La conversión. Con Cristo, el reino está cerca y dentro de nosotros. La voz del Bautista es el clamor del adviento: «Preparad el camino del Señor, allanad sus senderos; ... » (Is 40,3-5). El adviento nos enseña a hacernos presentes en la historia de la salvación de los ambientes, a entender el amor como salida de nosotros mismos y la solidaridad plena con los que sufren.

4. Jesús es el Mesías. Será el liberador del hombre entero. Luchará contra todo el mal y lo vencerá no por la violencia, sino por el camino de una victimación de amor. La salvación pasa por el encuentro personal con Cristo.

5. Gozo y alegría. El reino de Cristo no es sólo algo social y externo, sino interior y profundo. La venida del Mesías constituye el anuncio del gran gozo para el pueblo, de una alegría que conmueve hasta los mismos cielos cuando el pecador se arrepiente. El adviento nos enseña a conocer que Cristo, y su pascua, es la fiesta segura y definitiva de la nueva humanidad.
EVANGELIOS PARA ADVIENTO:
1ª semana:San Mateo (24,37-44)
2ª semana: San Mateo (3,1-12)

miércoles, 1 de diciembre de 2010

FIESTAS DE 1727.


FIESTAS SOLEMNES POR LA COLOCACIÓN DE N.ª S.ª DE LA PIEDAD EN SU NUEVO TRONO Y
CAMARÍN, DESDE EL 28 DE AGOSTO HASTA EL 3 DE SEPTIEMBRE DE 1727:


ALTARES:

"Vera Cruz:
Lo puso en la calle Platerías y estaba compuesto de 3 altares:
1º: Una custodia., una urna con la cruz de plata, el Ángel de la
Guarda, San Antonio, Santa Rosa y otro santo de la orden.
2º: El arcángel S. Miguel, ricos espejos de cuerpo entero, la Buena
Ventura y San Pedro Regalado.
3º: San Juan, una concha y en media la cruz, insignia de la cofradía,
con ángeles, cornisas y tiestos de plata. Y un arco y otros dos
de plata.


Pasión:
Lo puso en la calle de la Especería y fue de 3 altares:
1º: San Lorenzo. San Nicolás. Y San Bernardo, con arcos de plata y
2 ángeles.
2º: Urna con Nª Sª de la Pasión. San Fernando. Y Santa Rosa.
3º: Altar en medio punto con su media naranja y la insignia de la
cofradía.


Angustias:
Lo puso a la puerta de su Iglesia :
1º: Cabeza de San Pablo y urna de plata. Y Santos de medio cuerpo.
2º: Misterio de la Encarnación. Santo Domingo de Guzmán. Santa
Rosa. Y alhajas de plata.
3º: La Visitación de Santa Isabel. San Francisco. San Vicente Ferrer.
Dos ángeles con el estandarte de la cofradía.Y dos taffettas con las
insignias de la Piedad y otras dos de las Angustias. Se cerraba el
altar con un arco de medio punto y las insignias.


Jesús Nazareno:
En la calle Olleros; y estaba compuesto también de 3 cuerpos:
1º: Exquisitas alhajas y ricos frontales.
2º: Jesús Nazareno y los Santos Pedro y Pablo.
3º: Un arco de medio punto con una imagen de Nuestra Señora. Dos
ángeles de su Iglesia que están en su retablo y la insignia de la Piedad.”


RECORRIDO

Fue el siguiente: catedral, plaza de SantaM.ª, calle de la Obra, calle de la Parra, calle de Esgueva, plaza del Almirante (altar de las Angustias), calle Cantarranas, calle Platerías (altar de laVera Cruz), plaza del Ochavo, (altar de la Pasión), calle de la Sortija, y calle de Olleros (altar de JHS), y Orates hasta llegar al templo penitencial de la Piedad.

PLANTA DE PROCESIÓN:

.-“Clarines.
.-Zetros y Mayordomos de Cuerpos.
.-Niños de la Doctrina.
.-Claro de Diputados de la Piedad y su Estandarte.
.-Diputados actuales, 67 personas.
.-Paso: San Antonio de Padua, entre 4 diputados, con música sonora
de 4 Oboes que se trajeron de un regimiento de Zamora.
.-Claro del Guión, con diputados de la Piedad,41 personas.
.-La Danza, que corrió ambos claros.
.-Paso: San José, entre 4 diputados de esta cofradía, en sus andas.
.-Claro de JHS, 58 personas, con su Capellán, sus Alcaldes y su
danza.
.-Claro de las Angustias, 95 personas, con su Capellán, sus Alcaldes,
y Danza valenciana con vestiduras de volantes.
.-Claro de la Pasión, 85 personas, con guión, Capellán y Alcaldes
.-Claro de laVera Cruz, 80 personas, con guión y estandarte, Capellán,
Alcaldes y danza.
.-Señor Dean y Cabildo Catedralicio, con toda solemnidad, con sus
achettas, y en medio llevavan a Nra Sra de la Piedad entre 6 Capellanes,
y el Palio 8 Capitulares desta ilustre Ciudad.
.-Restantes Cavalleros y Corregidor, con hachas de libra y media de cera".
(Extraído del artículo "1727–1734: UNO DE LOS PERÍODOS HISTÓRICO DE MAYOR ESPLENDOR DE LA COFRADÍA DE N.ª S.ª DE LA PIEDAD DE VALLADOLID".
Congreso: La Semana Santa , ANTROPOLOGÍA Y RELIGIÓN EN LATINOAMÉRICA II, Roberto Alonso Gómez. Valladolid- Octubre 2010)

lunes, 29 de noviembre de 2010

125 AÑOS DE TRADICIÓN Y DEVOCIÓN DE LA PIEDAD EN RIOSECO


Enhorabuena a una cofradía hermana que hace muy bien las cosas.


La popular hermandad de la Semana Santa de Rioseco celebró este sábado el aniversario de su fundación con un emotivo acto.

Miguel de Unamuno escribió que «vivimos en y por el recuerdo, y nuestra vida espiritual no es en el fondo sino el esfuerzo que hacemos para que nuestros recuerdos se perpetúen y se vuelvan esperanza, para que nuestro pasado se vuelva futuro».


En ese intento de perpetuar su particular memoria, la Hermandad de La Piedad, de Medina de Rioseco, celebró, el pasado sábado 27 de noviembre, los 125 años de su fundación en 1885 con una serie de actos que tuvieron lugar en el Teatro Principal.

El presidente de la cofradía, el joven Raúl Martín, expresó esta conmemoración «va a ser un motivo de encuentro de todos los hermanos y hermanas en unas fechas tan alejadas de la Semana Santa». El acto también fue «un emotivo recuerdo y homenaje de todos los cofrades mayores y de los que ya no están con nosotros».

La conmemoración comenzó con la proyección del documental titulado Nuestra Cofradía que ha realizado el periodista riosecano José Ángel Gallego con la colaboración de la junta directiva, además de los cofrades, Ramón Pérez de Castro, profesor de Historia del Arte de la Universidad de Valladolid y estudioso de la Semana Santa riosecana, y el veterano Julio Fernández, quien ha prestado la gran cantidad de horas de video que ha grabado desde el año 1990, y que junto a un buen número de fotografías recopiladas, aparecen en un audiovisual en el que también hay un apartado para los cofrades difuntos y otro con los valiosos testimonio de los hermanos y hermanas con más de 50 años en La Piedad.


Más tarde, a todos los mayordomos de la cofradía se les hará entrega de una réplica de la Virgen de la Piedad que ha realizado el escultor riosecano y cofrade de esta hermandad, Ángel Martín.
La devoción por la Virgen de la Piedad en Medina de Rioseco es muy grande, siendo en la actualidad una de las cofradías riosecanas más numerosas con 95 hermanos y 199 hermanos. La cofradía ya celebró el centenario con un acto que entonces tuvo lugar en el casino, hace 25 años.

ALGO DE HISTORIA.

Se tienen noticias de una cofradía de Nuestra Señora de la Piedad desde comienzos del XVI, seguramente con raíces más antiguas, pero al finalizar el XVIII se extingue, refundándose en el siglo XIX en la actual hermandad. Es en ese momento cuando se integra en los desfiles procesionales del Viernes Santo, según cuenta los historiadores Ramón Pérez de Castro y Virginia Asensio.

En el XIX, la hermandad procesiona una Virgen con el Cristo muerto en su regazo del siglo XVI, que poseía y posee el convento de Clarisas. Esta imagen salió en procesión junto a dos pequeñas tallas de la Magdalena y San Juan hasta los años sesenta del siglo XX, cuando comenzó de nuevo a salir procesionalmente aquella primitiva talla que ya lo hacía en el siglo XVI: La Piedad de Santa Cruz, que es la talla más antigua de cuantas procesionan en Rioseco y, sin duda, una de las más bellas.

martes, 23 de noviembre de 2010

EL PINTOR QUE FUE ALCALDE DE LA PIEDAD


TOMÁS DE PRADO

Fue alcalde de la cofradía diversos años entre 1620 y 1630. Propuso la compra de un paso en 1630.

Su obra:

Pintó numerosos retablos en las provincias de Valladolid ( capilla mayor de Tudela de Duero , San Esteban de Valladolid , San Bernardino en San Francisco de Valladolid , altar mayor del monasterio de Santa Isabel de Jesús en Olmedo , capilla de Juan miguel en el monasterio de San Andrés de Medina del Campo , etc) .

Y Segovia ( San Andrés de Segovia , Capilla de Juan García en la iglesia de San Miguel de Cuellar).

Tuvo mucha relación con el convento de la Merced, ya que la cofradía tuvo allí su sede, esta orden le pagó por decorar el claustro, y le concedieron altar, entierro y capilla en el tránsito del claustro a la sacristía.
Esta capilla tanía bóveda, puerta y reja que daba al claustro.
En ella tanto Tomás de Prado como su mujer pusieron su retablo, armas, y escudo.

Había una lápida que decía: "Esta capilla es de Tomás de Prado y Santiago y Catalina de Herrera Villarreal su mujer y de sus hijos y herederos. Año 1628."
Posiblemente participase en la decoración del altar que aparece en la foto (abajo a la izquierda)

miércoles, 17 de noviembre de 2010

ESA GRAN LABOR COMENZADA




Desde este blog queremos dar la enhorabuena a los responsables de esta brillante idea, de ubicar en Valladolid el Centro Internacional de estudios sobre la Semana Santa.

Aquella idea se cimentó en el primer congreso celebrado en Febrero de 2008 sobre Gregorio Fernández y posteriormente se reafirmó en sendos congresos de carácter internacional sobre la Semana Santa, en Octubre de 2008 y Octubre de 2010.


Publicándose los libros de actas, de un gran valor en la investigación aportada por ponentes y comunicantes, todos ellos de gran relevancia, tanto a nivel nacional como internacional.
Sólo faltaría la aportación, si cabe muy importante, de los propios cofrades y de las cofradías.Esperemos que esta iniciativa siga evolucionando y mejorando con el tiempo.

El Centro se hace definitivamente una realidad tras la firma de un convenio de colaboración entre la Fundación Municipal de Cultura-Ayuntamiento de Valladolid, la Universidad de Valladolid y el Estudio Teológico Agustiniano de Valladolid el 6 de abril de 2009.

El 29 de julio de 2009 el Ayuntamiento de Medina de Rioseco se ha adherido al centro dándole su apoyo institucional. Tanto la Semana Santa de Valladolid como la de Medina de Rioseco tienen el reconocimiento de interés internacional.

Desde el 20 de abril de 2009 el rectorado de la Universidad de Valladolid nombró a D. José Luis Alonso Ponga el director del Centro. La subdirección del mismo la ejerce el director del Instituto Teológico Agustiniano de Valladolid, D. David Álvarez Cineira.

Ámbito de actuación:

En la Semana Santa actual coexisten, y conviven los siguientes elementos:
•Una religión basada en la fe .
•Una historia, tiempo a través del cual se ha configurado, enriqueciéndose este fenómeno hasta llegar a nuestros días.
•Un presente en el que todo lo relacionado con este periodo tiene una importancia tan vital para la sociedad porque sigue evolucionando .
•Un valor artístico incuestionable.
•El valor gastronómico.
•El valor turístico, siendo quizás el más visible en la actualidad.

lunes, 15 de noviembre de 2010

EL INDICADOR DE VALLADOLID


EL INDICADOR:
Libro interesante donde se habla de las 5 penitenciales que todavía continuaban existiendo en Valladolid a finales del Siglo XIX
Reseña de lo más notable que contiene esta ciudad por el Presbítero DON MARIANO GONZÁLEZ MORAL, bibliotecario de la U. de Valladolid, año 1864 .

Referente a la Piedad este sacerdote mencionaba lo siguiente:

"S Anton calle de su nombre núm 7.

Consta por instrumentos públicos que la capilla mayor de esta iglesia de órden gótico, que perteneció á los religiosos de su nombre, hospitalarios dedicados á la curacion de enfermedades cutáneas, la mandaron reconstruir para su enterramiento D Mateo y Dña Francisca de Tasis su esposa.


Fundadores del mayorazgo de los Vizcondes de Valoría por su testamento otorgado en Madrid á 13 de Marzo de 1535 y atendida la unidad del resto de la obra se construyó al mismo tiempo el resto del templo y capilla del Santísimo Cristo de Burgos, separado de él por una gran reja de hierro, del gusto y solidez de su siglo cuya obra fué costeada por los condes de Almodovar el patronato de la primera corresponde á la Excma Sra Vizcondesa de Valoria y el de la segunda a la ilustre familia de Verdesoto.

Las obras de todo segun la inscripcion que se Halla bajo la cornisa interior del templo se concluyeron en el año 1574.


Tambien consta que ruinosa la antigua iglesia de la Piedad celebró esta Cofradía en Octubre de 1727 una concordia con el último administrador de los religiosos D Fr Francisco Gonzalez y los patronos de la capilla mayor para trasladar á ella sus imágenes y la celebracion de las funciones religiosas.


Las efigies mas notables que se veneran en ella son la del Santo titular (San Antón), que tiene por peana un dragon de siete cabezas, la de la Santísima Virgen en el acto de su Soledad (Nª Sª de la Soledad) al pié de la Santa Cruz el Santísimo Cristo de Burgos y el Salvador en el acto de ser burlado como rey de escarnio (Cristo de la Humilad o Ecce Homo).


La Cofradía cstinguidos los hospitalarios continúa dando culto á su Santo titular y proporcionando la curacion de algunos enfermos de que aquellos cuidaban y para sufragar en parte sus gastos tiene el privilegio de rifar anualmente un cerdo.


Ésta iglesia sirve de ayuda de parroquia á la de S Esteban Cuando su Cofradía asiste á los actos públicos se distingue por su pendon encarnado ".

jueves, 11 de noviembre de 2010

SAN MARTÍN, cada 11 de Noviembre.


San Martín siempre la sitúan entre las parroquias más antiguas de Valladolid; la tercera después de La Antigua y La Magdalena.
Las escrituras hablan de ella en 1.148, y el Rey Fernando III la menciona en el año 1.247, cuando se refiere a la Virgen de la Peña de Francia.

En un principio la Iglesia debió ser una ermita, y una vez que adquirió gran importancia dentro de la villa, se reconstruyó a la forma que tiene actualmente según lo determinó Diego de Praves en 1.588, este contó con la colaboración de su hijo Francisco de Praves en 1.621.

Las obras estuvieron paradas entre 1.601 y 1.610, en 1.614 se levantó la traza. Según la tradición sufrió un incendio en 1.675.
En 1.694 y 1.698 se levantó la Capilla de D. Gaspar Vallejo.
La realizaron Pablo Mínguez y Manuel Izquierdo; Manuel Logondo diseñó la reja, que fue realizada en Elgóibar, por Bartolomé Elorza, se colocó en 1.701.


El relieve de San Martín de la fachada lo llevó a cabo Antonio Tomé en 1.721.
En el año 1.812 se incorpora la Parroquia de San Benito el Viejo a San Martín.
Allí fijó su sede la Cofradía de la Piedad a comienzos del siglo XX.
En 1.965 sufrió el hundimiento de su Cúpula y parte de la bóveda, perdiéndose la bóveda del crucero y la Cúpula de media naranja, acortándose la altura a la que tiene actualmente.

En Noviembre de 2.001 decide cerrarse al culto para proceder a su íntegra restauración.
Abriéndose nuevamente en el año 2007.
EL SANTO MARTÍN DE TOURS (soldado de Roma):

Hoy la Iglesia celebra la festividad de San Martín, este Santo recibió su educación en Pavía, ingresó con 15 años en la guardia imperial romana, en la que sirvió hasta el año 356, primero en Francia y luego en la Galia.

La leyenda más famosa en torno a su vida sucedería en el invierno de 337, cuando estando Martín en Amiens encuentra cerca de la puerta de la ciudad un mendigo tiritando de frío, a quien da la mitad de su capa, pues la otra mitad pertenece al ejército romano en que sirve. En la noche siguiente, Cristo se le aparece vestido con la media capa para agradecerle su gesto. Esta es la escena que iconográficamente se ha preferido para su representación.

Martín decide entonces dejar el ejército romano y convertirse, lo cual no puede hacer hasta pasado un tiempo, al negarle su licencia el emperador.
Tras dejar la vida militar se bautiza y se une a los discípulos de San Hilario de Poitiers en la ciudad de Poitiers.

En el año 370 es nombrado Obispo de Tours. Su vida pastoral se caracterizó por la evangelización y la lucha contra las costumbres paganas. Aunque perseguía las teorías del gnosticismo y maniqueísmo de Prisciliano, acudió ante el emperador Magno Clemente Máximo para evitar que fuera ejecutado. El obispo lusitano Hidacio insistió ante el emperador hasta que Prisciliano fue ejecutado. Martín, afligido y enfadado por este hecho, rompió sus relaciones con Hidacio. Más tarde tuvo que reconciliarse con él, cuando el emperador se lo exigió como condición a cambio de terminar con las ejecuciones de priscilianistas.

Fallece en Candes en el año 397. Su vida la escribe Sulpicio Severo probablemente ese mismo año. Es uno de los elementos que contribuyen fuertemente a difundir su devoción y presencia en la cultura popular.

Su festividad se celebra el 11 de noviembre, coincidiendo con la matanza del cerdo en muchas regiones de España, de ahí el origen de la expresión «A cada cerdo le llega su San Martín».

lunes, 8 de noviembre de 2010

Historias de Valladolid: LA IMAGEN DE LA PIEDAD, crónica de un desalojo inexplicable


20 de septiembre de 2010
Historias de Valladolid: LA IMAGEN DE LA PIEDAD, crónica de un desalojo inexplicable

Informe: J. M. Travieso.
Publicado por DOMUS PUCELAE
Etiquetas: Historias de Valladolid

Interesante artículo publicado en el blog Domus Pucelae, que hemos creido conveniente publicar aquí, esperemos sea de su agrado.

Y sobre todo ahora que se acerca la fiesta del patrón San Martín, el próximo Jueves 11 de Noviembre, para que interceda y este conflito se pueda solucionar de la mejor manera posible.

Escribir sobre temas que atañen a las cofradías penitenciales de Valladolid, también de otras ciudades, es parecido a caminar sobre un campo de minas, pues el asunto más inesperado te pude estallar en las manos por mucha objetividad y buena voluntad que se tenga, debido a la suspicacia e intransigencia que caracterizan a algunas de ellas, motivo por el que la mayoría de los cronistas se limitan en sus escritos a dosificar almíbar obviando la realidad, aunque lo cierto es que en muchos casos se cumple el dicho popular de "unos por otros, la casa sin barrer".

Un caso significativo, todavía no resuelto, es el rocambolesco exilio de la imagen de La Piedad de la iglesia de San Martín (ilustración 1), una joya del patrimonio escultórico vallisoletano cuya ubicación trae de cabeza durante ya muchos años a la citada parroquia, a los seguidores de la Semana Santa, a los amantes del arte, al mismísimo arzobispado y, sobre todo, a la propia cofradía. Todo ello producido por la falta de entendimiento entre la Cofradía de Nuestra Señora de la Piedad y la parroquia de San Martín, donde la histórica penitencial tiene su sede canónica.

No intentamos decantarnos por ninguna de las partes en litigio, pues tenemos muy claro el dicho cervantino "con la Iglesia hemos topado", sino hacernos eco de unos hechos que los vallisoletanos contemplamos sorprendidos, sobre todo cuando el asunto ha llegado a provocar situaciones verdaderamente surrealistas.

LA PIEDAD DE GREGORIO FERNÁNDEZ

Todo gira en torno al grupo escultórico compuesto por la Virgen rodilla en tierra y Cristo muerto en su regazo, una obra maestra realizada por Gregorio Fernández en 1627, en plena madurez del escultor, a petición de la familia Sevilla y Vega para presidir el retablo de la capilla de Nuestra Señora de la Soledad, fundada en 1590 en el convento de San Francisco por don Juan de Sevilla y su esposa doña Ana de la Vega, de la que los herederos ostentaban el patronato. Fue fray Matías de Sobremonte quien en su manuscrito "Historia del Convento de San Francisco" describió la colocación de la imagen en el recinto franciscano y su autoría, proporcionando una serie de datos que serían fundamentales en el futuro para su identificación.

La Piedad no fue concebida como escultura exenta con fines procesionales, sino como un altorrelieve de gran bulto reservado a la caja del retablo, por lo que su disposición es eminentemente frontal y con la parte trasera originariamente ahuecada, una técnica en la que Gregorio Fernández era un gran maestro, siendo retocada la espalda cuando fue destinada al uso procesional.

Su composición combina con sabiduría elementos cerrados, como el cuerpo inánime de Cristo en forma arqueada y envuelto por el sudario que se apoya sobre la rodilla de la Virgen, y elementos abiertos propios de la gesticulación barroca, como los brazos elevados de María en gesto de desamparo y su cabeza colocada hacia arriba y en diagonal, por lo que el juego de volúmenes permite su vista con la misma fuerza desde los costados.


El centro emocional se concentra en el expresivo rostro de la Virgen, con ojos de cristal y sabiamente envuelto por un juego de pliegues de tocas blancas, al tiempo que un manto verde-azulado, recorrido en los bordes por una cenefa decorada con motivos vegetales a punta de pincel, envuelve una túnica roja formando pliegues voluminosos que producen un fuerte claroscuro que potencia la desnudez de Cristo, cuyo cuerpo presenta un modelado blando de gran clasicismo y un estudio anatómico dotado de gran belleza, destacando el virtuosismo en la talla de barbas y cabellos, con una cabeza que sigue el prototipo creado por el escultor. Se completa con una policromía aplicada sobre las superficies como si se tratara de un lienzo, con encarnaciones en tonos mate, zonas sombreadas, resaltes luminosos en las mejillas y realismo en las llagas, siguiendo una iconografía ajustada a la que el escultor utilizara cuatro años antes en la Virgen y el Cristo del Descendimiento. El resultado es una magnífica obra devocional, de suma belleza, que muestra el alto grado de naturalismo conseguido por Gregorio Fernández en su etapa de madurez, superando por su clasicismo formal a otros modelos del mismo tema realizados por el escultor que se conservan en la iglesia del Carmen de Burgos, en el convento de Santa Clara de Carrión de los Condes (Palencia) y en la iglesia de Santa María de La Bañeza (León).
Hoy conocemos, en virtud de los estudios realizados por Jesús Urrea, que la talla fue policromada por el pintor Diego de la Peña bajo la supervisión de Gregorio Fernández (ilustración 2). También que Xaques del Castillo se ocupó del ensamblaje del retablo en el que se ubica la imagen y que el pintor Diego Valentín Díaz, el más prestigioso de Valladolid en su tiempo, fue el autor de la pintura de la "Imposición de la casulla a San Ildefonso" que corona dicho retablo (ilustración 9).


La talla fue liberada de sus toscos repintes a iniciativa de la Cofradía de La Piedad en 1986-1987 y de nuevo restaurada en 2004, momento en que su limpieza permitió recuperar su policromía original. Un dato poco conocido es que existe una réplica de la escultura en la cripta de la catedral de Santander, un regalo de Valladolid para honrar a los marineros caídos en la Guerra Civil en la que por entonces era provincia hermana de Castilla la Vieja. Igualmente es significativo que haya sido elegido el paso de La Piedad para formar parte del Vía Crucis que recorrerá las calles de Madrid el 19 de agosto de 2011, con motivo de la asistencia del papa Benedicto XVI a la Jornada Mundial de la Juventud.


PERIPECIAS DEL RETABLO


El retablo permaneció en San Francisco hasta la Desamortización de Mendizábal de 1836, momento en que desapareció el convento franciscano de la Plaza Mayor y fueron confiscados sus bienes, entre ellos una importante colección de obras pictóricas y escultóricas que fueron almacenadas en el Colegio de Santa Cruz, germen del futuro Museo de Escultura. Pero la imagen de La Piedad, en ocasiones mencionada como "La Quinta Angustia" no tuvo el mismo destino, ya que fue reclamada por la familia Salcedo y Rivas, herederos directos de la familia propietaria, que en esos años poseían el patronato de la capilla de San Ildefonso en la iglesia de San Martín, un recinto fundado en 1622 por don Alfonso Fresno de Galdo, que fuera obispo de Honduras y cuyo palacio familiar se hallaba en la vecina calle del Prado.


Trasladada la imagen a San Martín, fue colocada en la capilla de los Galdo (la tercera del lado del Evangelio, actualmente dedicada a San Juan de Sahagún), donde permaneció hasta 1912, año en que, debido a la gran devoción que despertaba en el populoso barrio, fue sacada de la pequeña capilla y colocada en el brazo derecho del crucero. Finalmente, con el fin de dotar a la imagen de un recinto de mayor dignidad, el retablo fue finalmente colocado en la espaciosa capilla barroca que ocupa el segundo lugar del lado del Evangelio y que desde 1701 aparece cerrada por una reja, a continuación de la capilla bautismal en que fuera bautizado el poeta José Zorrilla. Una suntuosa capilla, levantada entre 1694 y 1698, que fue patronato de don Gaspar Vallejo y que está cubierta por una bella cúpula barroca, diseñada por los arquitectos Pablo Mínguez y Manuel Izquierdo, con trabajos de yeserías polícromas que presentan un apostolado en torno a la figura de la Inmaculada (ilustración 3). Con este traslado La Piedad había encontrado un espacio barroco, digno y apropiado para resaltar los valores de la imagen y para recibir a sus devotos, que siempre han sido multitud.

La imagen de La Piedad fue sacada por primera vez en procesión en 1927, en pleno proceso de recuperación de los desfiles procesionales emprendido por don Remigio Gandásegui, arzobispo de Valladolid desde 1920 y verdadero artífice de las celebraciones de Semana Santa al estimular la recuperación de las cofradías penitenciales históricas, la creación de otras nuevas y el alumbramiento de los pasos tradicionales, labor que contó con la colaboración de Francisco de Cossío y Juan Agapito y Revilla. Entre ellas figuraba la hermandad de La Piedad, con la historia más compleja de las cinco históricas de Valladolid, cuya fundación se remonta a 1578.
En un principio encontró como primera sede la iglesia del Rosarillo y fue encargada de alumbrar el paso de la Sexta Angustia (Museo Nacional Colegio de San Gregorio), aunque pronto se le adjudicó como sede canónica la parroquia de San Martín por estar en ella recogida la imagen de La Piedad que Agapito y Revilla había identificado con la que describiera fray Matías de Sobremonte en la iglesia de San Francisco, a la que, desde el 21 de diciembre de 1930, la cofradía se comprometió a dar culto convertida en su paso titular, siendo aprobados sus estatutos por el arzobispo Gandásegui en marzo de 1934. Desde ese momento la iglesia parroquial vino colaborando en la cesión de la imagen para su uso en las celebraciones anuales y la cofradía mandó elaborar una bella carroza cuyos tradicionales adornos florales son admirados desde entonces, contribuyendo parroquia y cofradía a la brillantez de los desfiles procesionales.


LOS DESGRACIADOS ACONTECIMIENTOS Y LA DURA POLÉMICA


En toda España, pero especialmente en Valladolid, la conservación del patrimonio histórico-artístico conoció la desidia y el maltrato a lo largo de los siglos como un mal endémico, sobre todo en el siglo XX y en especial durante el despegue económico de los años sesenta, cuando junto a los estragos por abandono de muchos edificios se produjo una destrucción masiva de buena parte del entramado urbano que fue consentida en base a la especulación. Un desastre que algunos han llegado a comparar con los bombardeos producidos en la ciudad alemana de Dresde durante la Segunda Guerra Mundial. Este juicio, que no es exagerado y posiblemente se quede corto, sitúan a Valladolid entre las ciudades españolas con mayor patrimonio perdido sin que al Ayuntamiento, Iglesia, Universidad y a todo tipo de instituciones locales les temblara el pulso en aquellos años.


Fruto de la desidia y de la falta de recursos económicos uno de los edificios que se fue degradando sin remedio fue la iglesia de San Martín, cuya alta torre románica ha marcado durante siglos la fisionomía de la ciudad. Como consecuencia, las bóvedas barrocas de la nave y del crucero se vinieron abajo el 15 de marzo de 1965, causando considerables destrozos patrimoniales, comenzando por el propio templo (ilustraciones 6 y 7). Afortunadamente, pudo salvarse parte de la colección artística, especialmente la apreciada imagen de La Piedad, que fue puesta a salvo en la cercana iglesia de las Descalzas Reales.


A partir de entonces se han sucedido toda una serie de acontecimientos que podríamos calificar de insólitos. Si en un primer momento se especuló con demoler el templo y dejar sólo la torre pétrea, posteriormente se decidió conservar el edificio y restaurarlo, para lo que hubo que esperar casi veinte años. Durante ese tiempo la Cofradía de La Piedad fue acogida por la comunidad de clarisas de las Descalzas Reales, siempre con carácter provisional, siendo trasladada la imagen a esta iglesia en noviembre de 2001.


Desde 2004 a noviembre de 2007 se llevaron a cabo las obras de una restauración que afectaron a la totalidad de la iglesia de San Martín, consolidándose toda la fábrica, incluida la fachada y la torre, rescatando el pavimento repleto de lápidas sepulcrales de los siglos XVII y XVIII y realizando una nueva cubierta, un peculiar trabajo cuyo resultado estético, totalmente alejado de la concepción barroca original, produce una sensación de "quiero y no puedo", pues con discutibles criterios vanguardistas se ha reconstruido el cerramiento de la nave en forma plana, un cielorraso a la altura del entablamento que recorre el interior y que bien recuerda el techo de un garaje o de un establecimiento comercial del que penden modernas lámparas que contrastan con los refulgentes retablos barrocos recién restaurados (ilustración 8). Pero...¿se ha conseguido el diálogo entre los elementos barrocos y los vanguardistas, entre la curva por excelencia y las afiladas rectas?. Este es un punto muy discutible, pero uno no pretende ser purista y sólo hay que verlo para sacar una conclusión.


Pero hay más. Después de limpiado y pintado el interior del templo, fueron recolocados los retablos conservados y restaurados en sus correspondientes capillas, todos con sus pinturas y tallas relucientes en el momento de reabrirse al culto. Todos completos menos uno, el retablo de La Piedad, el que más expectación despertaba, cuya hornacina central aparecía vacía. La causa fue un enfrentamiento producido entre la cofradía y el párroco que parece no tener solución, pues unos y otros se enzarzaron en disquisiciones un tanto descabelladas. Si la cofradía, por lo que se ve más cómoda en la iglesia de las Descalzas Reales, a pesar de tener adjudicada su sede canónica en San Martín (ilustraciones 4 y 5), esgrimió ser la propietaria de la talla y tener derechos para decidir su ubicación, de lo cual no existe ningún documento de cesión o compra que lo avale, al párroco no se le ocurrió otra forma para reivindicar el regreso de la escultura que colocar en el retablo vacío una fotografía de tamaño natural de la imagen sobre un soporte de cartón, algo que con buen sentido después se ha eliminado, aunque permanece presente en uno de los muros a modo de protesta (ilustraciones 9 y 10). ¡Unos y otros sin piedad!


A pesar de la mediación del arzobispado en el pleito, de su decreto sentenciando el regreso de la imagen a la parroquia de San Martín, cuyos plazos han sido ampliamente sobrepasados, de la negación a la solicitud de cambio de sede canónica, decisión en la que incluso ha podido intervenir el Consejo Pontificio para los laicos, después de la puesta a punto del templo tradicional hace tres años, la imagen no ha regresado a su altar de origen en un gesto de desobediencia de la Junta de Gobierno de la cofradía, un hecho que algunos cofrades contemplan con temor y los vallisoletanos que conocen el caso con total estupor. ¿Pueden ser tan poco "piadosos" los responsables de la magnífica escultura de La Piedad que tantos fervores despierta entre los admiradores de Gregorio Fernández y en toda la ciudad? ¿Cuándo y cómo acabará la historia de este inexplicable exilio? Parafraseando al padre Astete, doctores tiene la Iglesia que os sabrán responder.









EL CONVENTO DE Nª Sª DE LA MERCED.

Para que la comunidad Mercedaria de Valladolid, actualmente en el Bº de la Victoria, se sienta orgullosa de su pasado y de su legado, desgraciadamente desaparecido.





























El Convento Vallisoletano, según diversos historiadores se fundó gracias a Doña Leonor Téllez de Meneses, Reina de Portugal
Su fecha exacta no se sabe con certeza, aunque puede decirse con algún interrogante, que lo fundó el propio San Pedro Nolasco a su paso por Castilla en 1.248.

Su primer nombre pudo ser el de “Monasterio de Santa María de la Merced e Santa Olalla de Valladolid”, pasando luego a denominarse “Santa María de la Merced”; estuvo ubicado por primera vez en la calle de la “Guariza” o “Boariza”, (actualmente calle de María de Molina), trasladándose a la ubicación actual hacia el año ¿1405?, aunque no se sabe con exactitud.

Un segundo personaje importante para la orden fue D. Rodrigo de Villadrando, primer Conde de Ribadeo.

En 1.843 después de la exclaustración, el Ayuntamiento de Valladolid, era partidario de mantener el edificio y usarlo como Casa de Beneficencia, pero finalmente se usó como cuartel militar.

En 1.849 se derribó la Iglesia Conventual, abriendo así la actual calle de la Merced, que une Maldonado con Don Sancho; sus piedras, que siglos atrás habían cobijado en sus inicios a la Cofrdía de la Piedad, sirvieron para encauzar el Esgueva; al igual que sirvieron medio siglo antes las piedras de la propia Iglesia Penitencial.

El Convento siguió usándose como cuartel hasta 1.902, instalándose en ese año la intendencia militar hasta 1.922; años después fue demolido y derribado todo el monasterio, construyendo en su lugar un moderno complejo de edificios.

jueves, 4 de noviembre de 2010

TRIDUO y CABILDO


La Cofradía de Nª Sª de la Piedad, en su boletín del mes de Noviembre, convoca a sus cofrades a un Cabildo extraordinario para informar sobre el Via Crucis de la Jornada Mundial de la Juventud.

Se celebrará el Domingo 28 de Noviembre a las 11,30 horas en colegio de la Enseñanza, (salón de actos).


Así mismo se informa también de lás próximas celebraciones litúrgicas:


Misa por los difuntos de la Hermandad el Sábado día 13 de Noviembre a las 18,45 horas.


Triduo a Ntra Sra de la Piedad, los días 19, 20 y 21 de Noviembre, a las 20,00 horas en la Iglesia Conventual de las Descalzas Reales.

Predicarán:

Viernes 19, D. Florentino del Castillo.

Sábado 20, Excmo y Rvdmo Sr. Don Ricardo Blázquez, Arzobispo de Valladolid.

Domingo 21, D. Manuel Fdez Narros.


El día 19 se entregarán los pergaminos correspondientes a los cofrades que llevan 50 y 25 años en la Hermandad.

El día 21 se celebrará el tradicional besapié a la Virgen de la Piedad (desde las 9 de la mañana a 14,00 horas y posteriormente desde las 14,00 horas hasta el final del Triduo.


martes, 2 de noviembre de 2010

LA VIRGEN DE LA PEÑA DE FRANCIA


Tradiciones perdidas, cofradías casi olvidadas, seguramente la cofradía más antigua de todas las vallisoletanas.
He aquí como en 1919 todavía esta cofradía eregida canonicamente en la parroquia de San Martín celebraba novena y procesión del 18 al 26 de Octubre.

Cofradía de la Peña de Francia:
.-Cofradía Devocional. (Siglo XII al XX, en 1920 existía todavía).
.-Es la Cofradía más antigua de todas.
.-Cofrades ilustres: .-FERNANDO III “EL SANTO”, JOSE ZORRILLA.
Esta Cofradía, según García Valladolid, poseía muchas indulgencias, destacaba la agregación de la Parroquia de San Martín a la Basílica de San Juan de Letrán de Roma por León XIII el año 1.888 con indulgencia plenaria.

La imagen de la Virgen de la Peña de Francia:
.-Imagen de vestir.
.-Siglo XII, fue articulada en el Siglo XVIII.
.-Ubicada en el Retablo Mayor.
Es una escultura románica, fue desvirtuada en el Siglo XVIII, desaparaciendo el Niño y articulándose los brazos.
En un principio estuvo situada en una Ermita de la calle del Prado, en cuyo lugar en 1869, se colocó una Cruz de piedra, inexistente hoy.
En 1601 fue trasladada a San Martín y en 1675, tras ser reconstruida la Iglesia por causa de un incendio, fue trasladada al retablo mayor, obra de Pedro de Cea.
En 1.965, tras el hundimiento del templo fue retirada y puesta en la Capilla del Baptisterio.


EL NORTE DE CASTILLA:
DIARIO INDEPENDIENTE DE VALLADOLID
FUNDADO EN 1854

Parroquia de San Martín. Jueves 16 Octubre 1919
Ea esta parroquia dará principio el dia 18 del corricnte la novena de la Santísima Vlrgen de la Peña de Francia.
Todos los días, a las 9, se oslebrará la santa misa, y a continuación la novena.
Por la tardo, a las 6, se rezará el santo rosario, novena y salve cantada, el día 26, fiesta principal, de la cofradía misa de comunión general.
A las 10, la solemne eucarítía, manifiesto y sermón que prodicará don Anastasio González, capellán de Santiago.
Por la tarde, a las cuatro, estación, santo rosario cantado y reserva; a continuación procesión con la Santísima Virgen por las callcs de la parroquia.


jueves, 28 de octubre de 2010

LA PIEDAD EN ANDAS: SEMANA SANTA 1929

Aquí dejamos, a raíz del artículo del Norte de Castilla de 1929, las fotos que aparecían en él. (Las imágenes no son de muy buena calidad, pues están sacadas de la Hemeroteca del Norte de Castilla y su escaneado ha sido difícil).


Pero se puede apreciar la talla de la Virgen de la Piedad al lado de la Cárcel (hoy en día la Biblioteca de la UVA Reina Sofía), al Cisto despojado de la Cofradía de Jesús, al Arzobispo Don Remigio Gandásegui con los presos, desde una ventana y desde luego a los cofrades de la Piedad delante de las andas, para llevar a hombros a su imagen en procesión.

Si la Piedad ha salido en andas y a hombros de sus corfrades.





lunes, 25 de octubre de 2010

AQUELLA PROCESIÓN DE CARIDAD y PENITENCIA


EL NORTE DE CASTILLA, SÁBADO 30 DE MARZO DE 1929.

Asi como el Jueves Santo ofrece como nota característica la tradicional visita a los Sagrarios,
prestando todo el día a la ciudad una animación brillante, el Viernes de la Cruz está consagrado en Valladolid por entero a las procesiones.
Cuatro figuran en el programa, y desfilaron ayer por núestras calles con gran solemnidad.
Las procesiones de nuestra Semana Santa son manifestación religiosa y artística de valor insuperable, que produce verdadero asombro en quienes la admiran por vez primera.

Ninguna ciudad podrá reunir tantas y tan admirables obras que lleven el nombre de Gregorio Fernández o Juan de Juni, o procedan de sus talleres de imaginería, que trabajaron en su tiempo incesantemente, impulsados por el pueblo entero.
Por ello es de desear que en lo sucesivo esta labor—iniciada hace alguno años por la brillante idea del excmo Arzzobispo Don Remigio Gandásegui -- siga brillando y que no se vean suspendias apresuradamente a causa de la lluvia. Afortunadamente, en el presente no ha dejado de lucir el sol.

Las procesiones, de est& año han resultado más brillantes y de más feliz rebultado que en los anteriores. Su organización ha sido perfecta. Y, especialmente en la del Santo Entierro, se ha notado más que en ninguna el avance y el xito. Así lo advirtió todo el mundo, consignando palabras de elogio.

Procesión de la Caridad: Hacia la Cárcel y el Hospital.


Se celebró ayer esta procesión por segunda vez. Desde hace dos años por iniciativa del arzobispo, como todo lo referente a la Semana Santa, y la idea, secundada por las personas interesadas, alcanzó un éxito rotundo.

A esta procesión acuden solamente los médicos y abogados vallisoletanos, y está formada especialmente para desfilar ante la cárcel y el Hospital. Como la otra vez, el llamamiento del prelado ha sido correspondido, y de la Catedral partió a las once y media el cortejo.

Abría la marcha el piquete de la Guardia civil, siguiendo la cruz parroquial y dos largas y nutridas filas. El número de médicos y abogados concurrentes ha sido aún mayor .
Tres imágenes aparecían en la procesión. El Cristo del Despojo, Jesús Nazareno y la Quinta Angustia, de Gregorio Kernandez, que se guarda en San Martín, y es una de las obras de arte maravillosas que poseemos.
Ante las tres esculturas iban comisiones de los Colegios de médicos y abogados, con hachones encendidos.
Ocupaba la presidencia el señor arzobispo, a quien acompañaban las autoridades, y el coro de la Universidad Pontificia que interpretaron en todo el trayecto severos cantos alusivos al solemne acto.
La procesión, como decimos, partió de la Catedral, dirigiéndose por las calles de las Angustias y San Martín a Chancillcrla. En todo el trayecto la concurrencia de gentes que presenciaban el cortejo era grandísima. Pero ante el viejo edificio de la cárcel habfa estacionada una enorme multitud, deseosa de presenciar el momento interesante y emocionante de atención y la plegaria de los presos. Allí había instalado una tribuna la Asociación para el fomento del Turismo, que estaba llena de distinguido público, en el cual había muchos forasteros. En la tribuna se hallaban el director señor del Campo, el subdirector señor Aguazas, el capellán señor Navarro, los oficiales de servicio señores Royo y Herrero y todos los oficiales de la plantilla.
En uno de los balcones de la Prisión se encontraban con sus familias el general gobernador señor Fernández Pérez y el coronel de la Guardia civil señor Martín Pérez. Y en otros se veían grupos de bellísimas señoritas.

El arzobispo señor Gandásegul invitó a una comida extraordinaria a los presos. También enviaron donativos el general gobernador señor Fernández Pérez y el Colegio de Abogados, los cuales los distribuyeron en metálico entre la población reclusa.
Al llegar frente a la cárcel de Chancillería, la procesión se detuvo. Avanzaron las tres imágenes, dando cara a las ventanas del edificio. A una estaban asomados los reclusos, y a ella subió
el arzobispo.
El coro de la Universidad Pontificia entonó una sentida plegaria, y los presos cantaron el «Perdón, ¡oh, Dios míol» A pesar de la enorme concurrencia de público y de la aglomeración,
reinó durante aqucllos momentos un respetuoso silencio.
El arzobispo dio un viva a la caridad y fraternidad cristiana, unánimemente contestado. Seguidamente la procesión se puso de nuevo en marcha, con las imágenes a hombros de los cofrades.

miércoles, 20 de octubre de 2010

LA CASA SOCIAL CATÓLICA


Gracias a un buen amigo por la información proporcionada, gracias amigo de corazón.
Así que uno va hilando cabos y terminando de hacer los encajes necesarios para casi terminar el puzzle.


La información proviene de un libro escrito en 1939 por los componentes de la CASA SOCIAL CATÓLICA, titulado "La Casa Social Católica de Valladolid. Memoria Histórica 1915 - 1938".


Y los encajes vienen a raiz de lo encontrado en los folios 96 y 97 del mencionado libro.

Se expresa lo siguiente referente a la continuidad histórica de la cofradía de la Piedad.


"... Así, formados con este espíritu de cultura honrada y cristiana, pudo muy bien el señor Arzobispo doctor Gandásegui, contar con la Casa Social Católica cuando trató de reorganizar las procesiones de Semana Santa de Valladolid con los megníficos e incomparables pasos de la preclara y admirada escultura castellana.
y... procedió a organizar a su cofradía, resucitando la antigua y casi extinguida de la Piedad.
Sencilla túnica y capirote negro, con cruz al pecho y cíngulo encarnado, vistieron estos nazarenos...".


Al final la continuidad de la Piedad está más que clara, sobre todo para aquellos que piensan que hubo un antes y un después.


Gracias a los hermanos cofrades de la casa social católica y a los cofrades que quedaban dispersos la Hermandad de la Piedad, después del cierre de San Antón, pudo volver a organizarse.

Hecho que se dio el 2 de Marzo de 1924, pero que significaba dar un paso más, uno de tantos, desde que se dio el primero el 22 de Agosto de 1578.


lunes, 18 de octubre de 2010

1er CONTACTO


Desde la Secretaría de la Piedad se ha enviado una carta a los cofrades como toma de contacto, de cara a los actos de la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ-Madrid 2011).


En ella se informa que el día 19 Agosto, se celebrará un Vía Crucis, que transcurrirá desde la pza de Cibeles hasta la pza de Colón.

La cofradía de la Piedad, acompañará a nuestra Madre en los actos de ese día. Se procesionará por las calles de Madrid y se representará la XIII Estación.


Los cofrades ya se pueden ir preinscribiendo, ya que es necesario ir conociendo el nº de hermanos que puedan estar inetresados en ir.


Con el fin de sufragar gastos se ha facilitado una cuenta bancaria por si alguien quiere entregar un donativo, además de proporcionar un nº de teléfono para mayor información.


En el boletín del triduo se informará más detenidamente sobre ello.


viernes, 15 de octubre de 2010

SAN PEDRO y SAN PABLO


Dos esculturas que formaron parte del altar mayor de la Iglesia de San Antón, y que actualmente están recogidas en el Museo Colegio de San Gregorio (antiguo M.N.E.).
Realizadas por DIEGO RODRÍGUEZ, en el año 1553 y en madera policromada.

En 1553 Doña Ana de Taxis, como titular del patronato de la capilla mayor en la iglesia vallisoletana del Hospital de San Antón, firmaba un contrato con los escultores Diego Rodríguez y Leonardo de Carrión, vecinos de Medina del Campo, por el que se comprometían a ensamblar y tallar un retablo con destino a este lugar. Las condiciones estipulaban un reparto en las tareas de ambos artífices quienes, siguiendo una costumbre frecuente, trabajaban en compañía. Medina del Campo era el lugar donde tenía su casa solariega Doña Ana de Taxis, viuda de Alonso de Quintanilla, y está sería la razón de formalizar el encargo con dos escultores que, en esa época, trabajaban allí en diferentes proyectos.

La documentación correspondiente a la policromía y pintura del conjunto, abordada en 1559 por Jerónimo Vázquez y Gaspar de Palencia, revela cómo se resolvía el conjunto y cual era el aspecto final que ofrecía en la desaparecida iglesia. El retablo, conservado en su mayor en el Museo Nacional de Escultura, se organizaba con una estructura compuesta por banco, tres calles, dos cuerpos y ático, combinando escultura y pintura.

Una de las cláusulas del mencionado contrato indicaba como «yo el dho diego rrodriguez escultor tengo de ser obligado de hazer ...dos figuras grandes que vienen encima de los rresaltos de las colunas grandes...». La identidad de las figuras quedaba aclarada al contratarse la policromía de las dos «figuras que son san pedro y san pablo que estan por remate del dho retablo», que los pintores se obligaban a «dorar y platear las ropas y sayos como convenga a cada una e pies e manos e rostro encarnado al olio». Las dos esculturas coronando los laterales del retablo, forman una pareja de evidente simbología en la doctrina evangélica, concebidas con una notable elegancia y verticalidad.

Las piezas se abordan con estaturas armónicas, muy bien proporcionadas, acentuadas pensando en su ubicación original en lo más alto del retablo, con una caracterización a partir de moldes tradicionales y sosteniendo el libro sagrado.

San Pedro se presenta como figura de mayor edad, calvo y con barba corta, sereno en su actitud. San Pablo, más joven, sin calvicie y con barba larga, ofrece una mayor tensión en un distinguido contrapposto. El brazo derecho cruza el cuerpo para sujetar el libro de un modo un tanto forzado pero más dinámico, como sucede con su pierna derecha, incorporando el atributo de la espada con la que sufrió martirio. El cierre equilibrado de ambas figuras está pensado para ocupar un espacio fijado: el brazo derecho en el caso de Pedro y el izquierdo en el de Pablo recogen el manto y establecen un límite lateral en la composición. Una vez más se comprueba que el escultor está asimilando las enseñanzas berruguetescas, aunque camine hacia una dulcificación de las formas en las que se atenúa la expresividad desgarrada del maestro, un camino que terminará por confluir con lo que estaba aportando Juan de Juni, y después el romanismo, al mundo de la plástica hispana.