martes, 27 de abril de 2010

OTRA SEMANA SANTA, LA NUESTRA.

Leo con asombro y con impotencia, un artículo publicado en el Mundo de Valladolid, Jueves 15 de Abril de 2010 y firmado por Jesús García Fernández, titulado "Otra Semana Santa".

Y leo perplejo párrafos como los que cito a continuación:

"No me gusta la Semana Santa, su estética me recuerda demasiado a períodos sombríos de la historia de nuestro país. Los cristos ensangrentados y los rostros desencajados por el dolor nunca debieron procesionarse. Incuestionables como obras de arte, dignas de exhibirse en el más afamado de los museos....

...Es muy posible que estas fiestas no sean de mi agrado porque no comprendo muy bien su significado. Nunca he entendido los tecnicismos teológicos utilizados en la liturgia. Los sermones y homilías cuajados de vocablos ampulosos como "cuerpo místico" o "gracia carismática"... Para combatir el desasosiego intento concentrar mi mente en otros asuntos más mundanos,propios de estas fechas, como el "Bacalao de Valderas"....

Supongo que la fe es el motivo fundamental que lleva a una persona a desfilar con capirote, la evocación de los años de la infancia, el seguimiento de una arraigada tradición familiar, la contemplación de la riqueza artística de los pasos, el sentimiento de que se está ante algo que forma parte del propio acervo cultural.... la convergencia de todo esto es la explicación para el éxito de este tipo de manifestaciones...

No obstante el Domigo de Pascua finaliza todo. La Iglesia también ha hecho caja y la vida continua en Valladolid. Pero quizás convendría hacer alguna reflexión antes de seguir con la cotidianidad. Durante estas fechas el católico rinde culto al Hijo de Dios hecho hombre, clavado en la cruz y resucitado, pero el resto del año un capuchón imaginario suele limitar la visión de Jesús Nazareno, encarnado en el parado, en el toxicómano, en el vagabundo, que pide limosna a la puerta de un templo en el que se guardan valiosas esculturas de Gregorio Fernández o Juan de Juni. O la de María su madre, en la mujer inmigrante que, acompañada de su pequeño, rebusca en los contenedores de basura...
Tranquilizar la conciencia pensando en Cáritas o en otras asociaciones de carácter religioso o laico no ha de bastar...

Yo como el joven rico del Evangelio de San Marcos, me marcho entristecido. Lo siento eso de la "Pascua florida" lo dejaremos para otra ocasión."

Que quiere que le diga señor García Fernández que no tiene razón, que la Iglesia hace una gran trabajo, que todas sus instituciones, organizaciones, personas, parroquias, etc hacen una gran labor a la sociedad.
Que los Cristianos, muchos, consideramos muchas cosas, seguimos el Evangelio de Cristo, a veces fallamos y pedimos perdón. Parece que Usted nunca falla y que no ve la viga en su ojo.
Es muy fácil criticar todo, la Semana Santa o lo que usted quiera.
Pero tenga una cosa clara, los católicos y los cofrades entre los que me encuentro, no sólo salimos en procesión estos días, ni sólo admiramos a nuestra imagen titular.
Somos personas que intentamos hacer el bien a cada hora, a cada minuto, intentando transmitir el mensaje de Jesús Nazareno como dice, de Jesús Resucitado; y de colaborar en lo que cada uno buenamente puede. Cofradías, Cáritas, Parroquias, Catequistas, Sacerdotes, etc... estamos al servicio de gente como Usted. No le quepa duda.

Y si admiramos a Cristos ensangrentados que deben seguir procesionándose.
Sino le gusta le ruego que nos respete, igual que yo le respeto a Usted pensando en el bacalao de Valderas.

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